– Por Jorge Gómez, Sommelier de Wine Art School,
y docente de enología en Culinary

Un Sommelier es el responsable de la venta y recomendación de vinos y bebidas alcohólicas y no alcohólicas en una tienda especializada o en un restaurante.

Algunas de sus funciones y conocimientos son:
1. Aconsejar y asesorar a los comensales de un restaurante sobre el maridaje de los vinos y alimentos
2. Asesorar al comprador del restaurante respecto de las marcas y tipos de vinos y licores que es necesario adquirir
3. Elaborar, organizar y actualizar la carta de vinos en el restaurante
4. Mantener y administrar la cava de vinos y los licores del bar
5. Conocer la geografía vinícola mundial y ser un experto en la cata de vinos
6. Poseer un amplio conocimiento de los vinos vendidos en el restaurante
7. Ser un profundo conocedor de la gastronomía y de las especialidades del restaurante donde presta sus servicios

Un Sommelier es un experto en vinos, ¿por qué?
– Es crítico de vinos, Maestro de Sala, actúa como un relacionador público y se encarga de presentar los nuevos vinos
– Es el encargado de realizar catas y degustaciones privadas
– Es un experto en atención a clientes para brindarle un servicio confiable, personal y objetivo
– Tiene la última palabra cuando, en una tienda especializada, un cliente duda o pide alguna recomendación sobre los vinos

Por otra parte, un Sommelier también debe tener conocimientos profundos sobre:
– Bebidas alcohólicas: destilados, aditivos y mezcladores
– Aperitivos y digestivos, y sobre la preparación e ingredientes de cocteles clásicos y modernos
– Sobre bebidas no alcohólicas, como café, té, aguas naturales. Puros y habanos: presentación, preparación y encendido
– Debe conocer a profundidad las especialidades gastronómicas del restaurante: ingredientes y forma de preparación
– Y, desde luego, debe conocer sobre reglas y recomendaciones de armonía o maridaje

Y como alguna vez dijo Joan Roca del Celler de Can Roca:

“El Sumiller, más allá del servicio del vino, es la mente líquida del restaurante. Abarca la gestión de la bodega, la definición de la propuesta de vinos, el estilo de cocina, atmósfera pretendida… es una persona preparada para gestionar bien el arte de la relación con los comensales. Hace falta que sea competente emocional y socialmente. Debe poseer atributos de generosidad, actitud, amabilidad, humildad, educación, cultura, idiomas, sensibilidad, ternura, curiosidad, respeto, paciencia, rigor y complicidad.”